¿Porqué marcharon (algunos) científicos?

• Astrobito Original: Why did (some) scientists march? por Ingrid Pelisoli

El sábado 22 de abril fue otro Día de la Tierra. Todos los años en este día realizan algunos eventos para apoyar la protección del medio ambiente.  Este año, el Día de la Tierra no fue diferente en ese sentido. Pero sí fue algo extraordinario en términos de magnitud.  Es probable que ya escucharon las noticias que muchos científicos y aficionados de la ciencia llenaron las calles alrededor del mundo en el evento llamado “Marcha por la Ciencia“. La idea de la marcha nació en Washington DC de los Estados Unidos, pero rápidamente aumentó su escala y al final resultaron siendo 610 marchas alrededor del mundo (ver Figura 1).   Las personas en las calles veían millones de personas con letreros divertidos, ropa de científicos, y otras herramientas para mostrar su mensaje.  Una pregunta que muchas de las personas que asistieron a la marcha escucharon fue ¿Porqué?  ¿Porqué los científicos pararon de hacer ciencia durante un día para salir a la calle? Ya que no siempre el público está interesado en lo que están haciendo los científicos (desafortunadamente), tenemos que aprovechar y explicar nuestros motivos.  Este astrobito intenta hacerlo, pero seguramente no será completo.  Sí tu tienes alguna razón para marchar, o al contrario para no marchar, ¡por favor déjanos los comentarios abajo!

Figura 1: Marchas satélites alrededor del mundo, tomado de la página oficial el día 22 de abril. Incluso marcharon en la Antártica!

Una celebración de la ciencia

La meta principal de la marcha fue celebrar la ciencia.  La ciencia tiene un rol importante para nuestras vidas, desde los teléfonos celulares en los bolsillos hasta la calidad del aire que respiramos (un participante mostró una lista de razones en la Figura 2).  Algunos piensan que la ciencia debe estar separada de la política, y por lo tanto no fue un buen momento para marchar con tanta inestabilidad política en el mundo.  Sin embargo, otros científicos piensan que la ciencia no puede alejarse de la política, como explica este astrobito (en inglés).

Figura 2: Este letrero da un buen resumen de lo que la ciencia nos ha dado, y fue publicado en la pagina de Facebook del evento.

La marcha es un pequeño paso para cerrar esta brecha, pero definitivamente es un paso hacia adelante.  Se defendió la ciencia como algo distinto que “una creencia”  y se mostró al mundo lo que significa integridad científica.  Científicos llegan a conclusiones a través de hechos, siguiendo el famoso y aprobado método científico que deja que otros verifiquen el trabajo.  Científicos no inventan las soluciones.  Un primer paso es explicar al público que pueden y deben verificar los hechos por ellos mismos, y que la ciencia es algo para valorar e invertir.

A propósito, hablando de inversiones, la marchas sirvieron para pedir a muchos gobiernos que dejen de cortar el financiamento para la ciencia.  Los Estados Unidos es un ejemplo emblemático, donde el Presidente Trump ha propuesto cortes grandes para la Agencia para la Protección del Medioambiente (Environmental Protection Agency) y los Institutos Nacionales de Salud (National Institutes of Health).  En Brasil, los fondos se redujeron a la mitad  de la propuesta original, y dejaron a muchos científicos con incertidumbre del futuro.  En Argentina, los científicos “ocuparon un ministerio en reclamo de becas” después del anuncio del presupuesto por el Presidente Macri.

Durante la marcha en el Reino Unido, algunos mostraron banderas de la Unión Europea (ver Figura 3) para expresar su temor de la salida inminente del Reino Unido desde la Unión Europea (conocida como el Brexit) y el impacto de la salida para la ciencia.   Científicos en el Reino Unido reciben millones de euros a través de programas de investigación europeas y también tienen acceso a importantes proyectos europeos.  La Agencia Espacial Europea, por ejemplo, recibe apoyo de la Unión Europea, y el Reino Unido es un participante.

Figura 3: En la marcha en Londres, algunos portaron la bandera de la Unión Europea.  (Foto por Arthur Loureiro)

La marcha buscaba alentar a los científicos que compartan la importancia de sus investigaciones en sus propias comunidades cercanas.  Además mostraba al público que los científicos están dispuestos a trabajar con la comunidad, escuchar sus dudas, responder a sus preguntas, y pensar en ellos para el futuro de sus investigaciones.  La ciencia no solo ocurre adentro de los laboratorios.  La marcha será un éxito cuando el público entienda mejor el proceso y el propósito de la ciencia.

Así comenzamos

Es importante recordar que la marcha en sí no va a resolver todos los problemas.  Es solo el comienzo de un proyecto que sigue en el futuro.  Después de la marcha, se realizó una “Semana de Acción” con distintos eventos para desarrollar la comunicación entre científicos y el público con el propósito de juntar fuerzas y apoyar la ciencia.  Cada día se enfocó en una cierta etapa del proceso científico, desde participar en un proyecto científico hasta llegar a un descubrimiento y por último comunicar los resultados.  El último día de la semana que se terminó el 29 de abril promovieron lazos entre el público y los científicos de cada comunidad.

Los propósitos de la Marcha por la Ciencia deben tener aplicación en nuestras vidas cotidianas. No se silencie, haga que su ciencia sea escuchada, esté orgullosa de ella.  Mostrar a la gente por qué la ciencia importa, cómo la ciencia puede afectar e incluso salvar sus vidas. Y al hacer eso, también estar abierto a otros y escuchar sus preocupaciones. La ciencia debe ser construida por todos, para todos.

(Imagen destacada en la página principal es de la Marcha por la Ciencia en Chile)